La integración de los hijos de inmigrantes en el mercado laboral

El estudio del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social: “La integración de los hijos de inmigrantes en el mercado laboral”, trata de hacer un diagnóstico de la integración de los hijos de inmigrantes de 19 a 29 años en el mercado laboral y, más especialmente, de los potenciales obstáculos que puede encontrar en esta integración, y entre ellos la existencia de discriminación.

Se trata de un estudio que combina una triple aproximación: 1) cuantitativa, con una explotación ad hoc de una submuestra compuesta por 1603 hijos de inmigrantes y 467 autóctonos de la encuesta ILSEG[i]; 2) cualitativa, con 45 entrevistas en profundidad (15 por cada grupo de origen a hijos de inmigrantes marroquíes, dominicanos y peruanos de entre 19 a 29 años, con distintos niveles de educación formal y; 3) una exploración cualitativa de las prácticas y actitudes de los empleadores en la publicación de ofertas de trabajo y en la selección y contratación de candidatos para los puestos ofertados.

A continuación, se detallan las principales conclusiones que están presentes en el informe.

Inserción en el mercado de trabajo.

Tanto los jóvenes de origen español como los jóvenes hijos/as de inmigrantes padecen altos niveles de movilidad laboral (más del 40% en ambos grupos habría tenido en ese tiempo 3 o más empleos), altos niveles de contratación temporal (52% de los hijos de inmigrantes y
55% de los nativos) y salarios bajos, con más de las tres cuartas partes en ambos grupos ingresando menos de 1000 euros al mes.

En este marco general de precariedad que afecta a la juventud española, se observan mayores desventajas en lo que respecta a los jóvenes hijos/as de inmigrantes. Por una parte, los niveles educativos alcanzados por los autóctonos son significativamente superiores a los alcanzados por los hijos de inmigrantes (61% frente al 37% tienen formación profesional superior o estudios universitarios). Esto supone que será considerablemente mayor la proporción de hijos de inmigrantes que tengan puestos de trabajo no cualificados o semi-cualificados (17% más).

No obstante, tal y como se apunta en el informe, las diferencias existentes en los niveles educativos no llegan a explicar suficientemente las diferencias en los tipos de trabajos que obtienen unos y otros. Con el mismo nivel de estudios, una proporción muy superior de hijos de nativos consiguen empleo como técnicos y profesionales comparado con los hijos de los inmigrantes (40% frente a 20% con estudios universitarios). Lo que parece evidenciar una situación objetiva de discriminación.

Los hijos/as de inmigrantes tardan más que los hijos de los nativos en encontrar empleo (Un 64,2% de los jóvenes de procedencia española declara haber conseguido su primer empleo en menos de 3 meses., mientras que ese porcentaje disminuye al 55,3% en el caso de los jóvenes con trasfondo migratorio.) y les cuesta más obtenerlo mediante de las vías más habituales (envío de currículos en webs especializadas o presentación física). Ante esta dificultad, los hijos de inmigrantes recurren más a su entorno cercano (familia, amigos) para obtener empleo y este entorno cercano se ubica en los niveles inferiores de la escala laboral.

Experiencias y percepción de discriminación

No parece haber importantes diferencias en el grado y frecuencia con que los jóvenes hijos/as de inmigrantes y nativos dicen haberse sentido discriminados. El 28% de hijos/as de inmigrantes manifiestan haber sido objeto de discriminación al buscar trabajo, es el mismo porcentaje que manifiestan también los nativos.

Hay, eso sí, diferencias en los motivos por los que unos y otros creen haber sido discriminados. Los jóvenes de origen inmigrante mencionan preponderantemente motivos vinculados a su origen extranjero. El 48,2% afirmó que el motivo de la discriminación venía dado por su nacionalidad. Sólo un 6,3% ha mencionado un tipo de discriminación no relacionado con la procedencia étnica/racial/cultural. Mientras que los nativos aluden a situaciones típicamente reportadas en las sociedades occidentales como motivos de exclusión (el género, la edad, la clase social, la posesión de alguna discapacidad, etc.).

Cuando se les pregunta a nivel general sobre los motivos por los que la sociedad española discrimina, los jóvenes de origen inmigrante afirman con mayor rotundidad que el color de piel es un importante motor de la discriminación (el 29% de los de origen inmigrante casi dobla al 15,8% entre los nativos). A la inversa, los autóctonos reconocen en mayor medida a la religión como un factor que puede generar actitudes discriminatorias (el 13,1% de los autóctonos casi dobla al 6,7% de los jóvenes con procedencia inmigrante).

Los procesos de selección y contratación en las empresas: ¿facilitadores u obstaculizadores de la contratación de hijos de inmigrantes?

Como se apunta en el informe, los modelos de selección de personal influyen en las posibilidades de los jóvenes hijos/as de inmigrantes para encontrar un empleo.

Los modelos que se caracterizan por estar muy estructurados con procedimientos standard y una criba progresiva de candidatos, pasando por distintas instancias y pruebas, se hacen especialmente difíciles para los jóvenes inmigrantes que no tienen el trasfondo cultural familiar que en muchos casos resulta ser una gran ventaja comparativa.

Sin embargo, los modelos que, sin descuidar las capacidades, se caracterizarían por estar más centrados en la persona candidata, ofrecen mayores posibilidades de hacerse valer a los jóvenes de origen inmigrante .

 

[i] Investigación Longitudinal de la Segunda Generación en España (ILSEG).

 

Descargar PDF