Programa ARRAKASTA

A los 14 años, por distintos motivos que ahora no vienen a cuento, tuve que irme a vivir a un piso de acogida, o como dice la gente, a “un centro de menores”. Desde que tengo uso de razón, esto es, aproximadamente desde que tengo 5 años, siempre he querido ser médico, por ello, sabía que mi educación sería la que me ayudaría a conseguir mi sueño.

Estudiantes del Programa Arrakasta en la UPV/EHU

Algo que me sorprendió mucho cuando entré al piso de acogida fue, que este horizonte académico no era compartido por mis compañeras y compañeros. De hecho, ellas y ellos tenían en mente una formación de corta duración, básicamente, realizaban PCPIs, y ni siquiera se les pasaba por la cabeza realizar estudios de bachillerato para una educación superior.

 

En este artículo vamos a presentar un programa pionero que se ha puesto en marcha en el País Vasco (España) llamado ARRAKASTA, que en euskera significa ÉXITO. El objetivo principal de este programa es reforzar y/o crear las condiciones favorables necesarias para el éxito académico universitario de estudiantes de la Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea (UPV/EHU) que proceden del sistema de protección a la infancia e inclusión social.

Programa ARRAKASTA (Universidad-Diputación- Jóvenes- Fundación SM)

El programa ARRAKASTA tiene su origen en el contexto de una investigación que está llevando la doctoranda de la UPV/EHU Joana Miguelena Torrado. En dicha investigación se pretende, entre otras cuestiones, analizar los itinerarios educativos de las niñas, niños y adolescentes bajo la medida de protección de acogimiento residencial. Para ello, pasó un cuestionario entre profesionales de red de acogimiento residencial de Gipuzkoa, entrevistó a 15 de ellos, así como a jóvenes que habían llegado a la mayoría de edad en algún recurso residencial de protección. En las entrevistas de ambos colectivos se pudo percibir, la desigualdad de oportunidades que estos jóvenes tienen para realizar estudios universitarios.

A pesar de que yo tenía claro de que yo quería ir a la universidad, las únicas opciones que me ofrecían las educadoras y educadores del piso de acogida eran la de encontrar un trabajo o cursar una formación rápida (pensando en nuestro bien). Ellos justifican estas “salidas” como reales, porque acceder a la universidad les parecía una “salida” irreal. Reflexioné mucho durante largas y oscuras noches con la almohada sobre qué debía hacer, qué sería lo mejor para mí y lo más “real” y concluí en que tenía dos opciones claras: 1) rendirme y dar por imposible el sueño que me acompañaba desde los 5 años y 2) arriesgarme, a sabiendas que todo podía salir mal y no tendrían apoyos para sobreponerme.

Ante esta realidad, y la de otras jóvenes que estaban en la misma situación, se tramitó al Vicerrectorado de Innovación, Compromiso Social y Acción Cultural de la UPV/EHU esta inquietud y la posible solución. Se creó un programa que “blinda” el itinerario académico universitario de jóvenes tutelados y extutelados del sistema de protección, siendo las demandas explícitas de los jóvenes la base que sustenta el mismo. Para poder satisfacer dichas demandas era necesaria la coordinación a varios niveles de distintos agentes: la UPV/EHU (personal académico y personal de servicios técnicos de atención al alumnado), la DFG (red los servicios sociales de atención secundaria, red de servicios sociales de protección a la infancia y la adolescencia) y las personas que vayan a tomar parte.

 

La UPV/EHU

La UPV/EHU realiza la acogida del joven o de la joven desde el primer momento que vaya a matricularse en la UPV/EHU, creando un programa de acogida y seguimiento. Éste ofrece al colectivo de jóvenes dos tipos de apoyos, uno logístico y otro académico (más información sobre los apoyos que se les ofrece desde la UPV/EHU https://www.ehu.eus/eu/web/ikasleak/arrakasta ).

La Diputación Foral de Gipuzkoa

Desde la red de protección a la infancia y la adolescencia se realiza una detección temprana de los itinerarios educativos universitarios.

Desde la red de servicios sociales de atención secundaria de inclusión social se trabaja a dos niveles. Por una parte, se realiza una acogida y seguimiento en el itinerario de educación superior de las y los jóvenes, ofreciendo a su vez, garantías que les permitirán cursan sus estudios de un modo exitoso (alargar el tiempo de contrato de estancia de jóvenes que estén cursando estudios superiores, prorrogable hasta los 23 años; incluir una cuantía económica que les permita asumir los gastos derivados de los estudios, de manera complementaria a las becas del Gobierno Vasco, etc.). A su vez, en el caso de jóvenes que han estado bajo la medida de protección del acogimiento familiar, se les garantiza el mantenimiento de la ayuda económica del programa de emancipación en acogimiento familiar durante todo el itinerario formativo, limitado hasta los 23 años, al igual, que se les prestará apoyo psicológico en caso de necesidad, seguimiento periódico del proceso personal y formativo, acceso en determinadas circunstancias a ayudas complementarias para cubrir necesidades que se consideren básicas, entre otras.

Los jóvenes

Las y los jóvenes para participar y mantenerse en el promana tienen que cumplir los objetivos del programa de acompañamiento de la Diputación y tienen que aprobar un número de créditos del curso académico en la UPV/EHU.

Desde que comencé a participar, las distintas instituciones se reunieron conmigo para conocer cuáles eran mis necesidades, qué apoyos necesitaba, así como a afrontar los inesperados contratiempos para al acceder a la universidad: la tramitación de la beca, flexibilidad de la diputación, etc. Asimismo, a lo largo del primer curso, a medida que me iban surgiendo nuevas necesidades, se me iban ofreciendo distintas ayudas.

La Fundación SM

N. Balluerka (UPV/EHU ) y J. Palop (Fundación SM)

La Fundación SM, en el mes de abril de 2018 suscribió un convenio con la UPV/EHU para ayudar a que el programa Arrakasta fuera más allá de lo previsto, y brindar a las y los jóvenes que en él participan, oportunidades hasta entonces no contempladas. Todas estas oportunidades se llevan a cabo a través de “Becas de la Fundación SM”, que tienen una dotación anual de 15.000 euros.

 

En el primer cuatrimestre, nos informaron de la posibilidad de realizar una movilidad internacional el curso académico siguiente. Cuando comenzamos a estimar los gastos y el montante que supondría embarcarme en esta aventura, nos dimos cuenta de la indecente cantidad de dinero que era necesaria. Aunque tengo que reconocer que había comenzado a perder la esperanza, ese apoyo de la Fundación SM, junto con la colaboración de la Universidad y la Diputación, han hecho que actualmente pueda estar escribiendo este artículo en otro país con una “Beca de la Fundación SM” y en un programa ERASMUS. 

 

La presentación oficial de Arrakasta tuvo un considerable impacto en los medios de comunicación vascos, donde durante unas cuantas semanas se habló de chicas procedentes del sistema de protección en la universidad, dando voz a las propias jóvenes que mostraron un lado positivo del sistema de protección y del colectivo que allí es atendido (que es mayoritariamente positivo aunque no cursen estudios universitarios), al igual que enamoraron al público por su serenidad, madurez, fuerza y resiliencia. Asimismo, se espera que profesionales y niñas, niños y adolescentes atendidos en el sistema de protección incorporen una nueva mirada con expectativas en estudios superiores.

Considero que este programa facilita y permite que los jóvenes extutelados y tutelados con el claro objetivo de continuar nuestros estudios y llevar a cabo una educación universitaria, gocemos de las mismas oportunidades que gran parte de los jóvenes de nuestro entorno tienen, ya sea una estancia en el extranjero con el programa Erasmus, la realización de un máster necesario para ejercer la profesión, o simplemente, la gran posibilidad de acceder a la universidad.

 

Autoras: Joana Miguelena y Yasmin Sidi.